LA IZQUIERDA Y LIBIA

Realizado por Eduardo Manrique Esteves y Egda Rojas

Estudiantes del PIU-UBV/Sección 6N

Núcleo: Relaciones de Conocimiento, Hegemonía y Transformación Social

El 20 de Octubre del presente año, se llevo a cabo el foro de opinión sobre ¡La Izquierda y Libia!, promovido por el Foro Itinerante de Participación Popular y la Agencia de Noticias de la Resistencia Libia, con el apoyo del Programa de Formación de Grado de Estudios Políticos y Gobierno de la UBV y que tuvo lugar en el Salón Simón Bolívar de esta casa de estudios.

El mismo conto con la presencia en calidad de oradores, de los profesores Vladimir Acosta y Reinaldo Bolívar. Contó además como invitado especial, con la presencia del Sr. Vladimir Ramírez, hermano de Illich Ramírez, quien encabeza el movimiento “Brigada Internacionalista de Solidaridad Activa” – BRISA, iniciativa internacional cuyo objeto, es la repatriación de Ilich Ramírez Sánchez a Venezuela, así como la búsqueda de solidaridad humanitaria y demanda de asistencia jurídica del gobierno venezolano, en atención a las condiciones violatorias de DDHH  dadas por el gobierno francés a este venezolano.

Este foro, nos brindo un enfoque histórico de Libia desde el Rey Idris hasta el proceso que provocó su derrocamiento por parte del ejercito liberador de Gadafi, nos presentó los escenarios políticos precedentes al conflicto interno, la injerencia internacional y las opiniones de los sectores de izquierda sobre la intervención de la OTAN en la nación norafricana, haciendo énfasis en el análisis y la repercusión que estos acontecimientos pueden suscitar sobre los países de la izquierda Latinoamericana, donde Venezuela tiene un papel preponderante tanto en la región sureña como en el Caribe.

Es claro que la autodeterminación de los pueblos, no es una premisa a considerar por los países imperialistas. La OTAN, ha bombardeado a una nación durante meses con la excusa de “proteger” a la población civil de sus gobernantes y ha legitimado el uso de la fuerza, justificado la violación de los derechos humanos, vulnerando el derecho internacional y legalizando la creación de grupos mercenarios de insurgencia, como recurso “necesario” para derrocar gobiernos.

Observamos con preocupación, como los países de la OTAN y las potencias imperialistas como EEUU, han ajustado a conveniencia el discurso y la terminología utilizada en los medios internacionales con el propósito de expandir su dominación. Poco se comenta de los llamados “terroristas” como Bin Laden en Afganistán o Sadan Husein en Irak, los cuales fueron utilizados como excusa de las potencias capitalistas para satisfacer sus mercados, alcanzar sus objetivos de depredación, la repartición de recursos y subyugar a sus pueblos.

Ahora surge una nueva ola de perseguidos que se levanta sobre la autonomía de las naciones bajo el calificativo de “gobiernos dictatoriales”, tal como fuese tildado el gobierno de Muamar Gadafi en Libia y que avalados por la complicidad del consejo de seguridad de Naciones Unidas y las acciones genocidas de la OTAN tiende a expandirse sobre aquellos países que se encuentran bajo la mira de los autodenominados “policías del mundo”.

Estos elementos nos dan a entender, que lo ocurrido en Libia no está lejos de ocurrir en los países que adelantan procesos de cambio social y que emergen en toda la América Latina, muy en contrario, se vislumbra una profunda presión imperial sobre las naciones que buscan la transformación hacia nuevos modelos socio-productivos, que intentan erradicar los marcados lazos de opresión propuestos por el TLC, el ALCA, el FMI y el Banco Mundial y que pudiesen ser enmarcados dentro de los llamados “gobiernos dictatoriales”.

Venezuela no escapa de esta maniobra internacional, recordemos que entre las últimas acciones adelantadas por el gobierno libio de Muamar Gadafi, se encontraba la creación de una moneda única para el fortalecimiento económico de la unión africana y parte de estas acciones se convirtieron en el detonante que acelero la invasión a libia por parte de la OTAN.  Venezuela amenaza a los países capitalistas con la creación del ALBA, el Banco del ALBA, Mercosur y las iniciativas que se adelantan para una moneda común del Sur, que haga frente a los mercados y grandes capitales de EEUU y Europa.

 

Estos hechos, nos colocan a la cabeza de los objetivos que como nación, representan intereses contrarios a los del imperialismo. Es necesario profundizar el debate, ampliar la participación y radicalizar las acciones para fomentar nuevos valores éticos, reformular la identidad nacional y fortalecer nuestros medios tecnológicos en defensa de la soberanía y autodeterminación de nuestro pueblo.